Hace tiempo que nos recomendaron un restaurante llamado Casa Palet. Tienen un local en el mercat de glòries donde realizan platos un poco más elaborados, pero creemos que el corazón del restaurante está en lo que era un pequeño colmado en el Carrer Laforja. Así que hace unas semanas, decidimos visitarlo para poder vivir la experiencia de degustar lo que ellos definen como “la cocina de mercado”.
Paseando por la calle, el local llama la atención. Tiene unas ventanas bien amplias donde puedes observar a los comensales y también tienen una barra elevada que da al ventanal de la calle que te recuerda a un bar. Estos detalles hacen que no evites poder mirar que ocurre dentro, y cuando levantas un poco la vista, y te fijas en lo que hay alrededor no puedes evitar ver la decoración del espacio.
Casa Palet es más que un simple restaurante. Te das cuenta con simplemente entrar, ya que en la izquierda del local encontramos un mostrador típico de charcutería de mercado con productos frescos expuestos. Además, la sala está envuelta por estanterías de estilo industrial que contienen conservas y una gran variedad de vinos.
En ese instante sabemos como cliente, de que el producto estará cuidado y será de calidad, y es cuando el eslogan de “cocina de mercado” tiene sentido. El local refleja claramente esa idea y ahí reside su encanto. Sabes que es un lugar con historia, y que no es un restaurante más.
Su historia
Casa Palet nació como una “Casa de Queviures” en el año 1920 y durante muchos años fué un colmado. Sin embargo, a partir del 2009 decidieron darle un nuevo concepto a la tienda y decidieron añadir un restaurante pequeño en el piso de arriba del local. De esta manera podían combinar el servicio de restaurante con la venta de productos, siempre siguiendo el mismo hilo conductor: el mercado y la comida de calidad.
Experiencia
Si volvemos a nuestra vista al restaurante, queremos remarcar que nos atendieron amablemente y nos detallaron todos los platos que habían disponibles en la carta. Se podía sentir que la cocina iba a un ritmo frenético, pero se agradece que a pesar de la cantidad del trabajo que haya, el personal se pare a explicarte y detallarte todos los diferentes platos de la carta. Sin pausa pero sin prisa, porque en ese momento lo importante es el cliente.
La carta plasma perfectamente la idea del restaurante con una gran variedad de platos tradicionales. Además, están elaborados con cariño para resaltar las propiedades del producto fresco. Uno de sus platos más conocidos son las hamburguesas que sirven a la piedra, y es normal que destaquen sus carnes, ya que recordad que era un colmado. Sin embargo, nosotros os recomendamos que os atreváis también a coger algún pescado como los lomos de sardina ahumados.
En resumen, Casa Palet es un restaurante aparentemente sencillo con encanto, donde hacen una énfasis especial en la comida de calidad y el buen servicio de atención al cliente.
Casa Palet es un restaurante aparentemente sencillo con encanto, donde hacen una énfasis especial en la comida de calidad y el buen servicio de atención al cliente. Clic para tuitear
Os dejamos el enlace a su página web por si queréis echarle un vistazo: https://www.casapalet1920.com