Durante estos años de crisis económica, son muchas, las personas que han decidido vencer las adversidades referentes a la falta de trabajo, montando un negocio. Algunas ya lo tendrían en mente pero son muchas otras las que se han lanzado a la piscina y han decidido buscarse ellos el trabajo apostando por la autonomía. Para todas estas personas y para todas aquellas que estén pensando en montar un negocio o ya lo tengan, sepan que éste necesita un propósito.
Cuando decidimos montar un negocio tenemos que pensar en muchas cosas, entre ellas, los gastos que supondrá el negocio, ya que según el Ministerio de Industria hay que contar con una inversión mínima de 3000 euros para constituir una sociedad. Pero hay muchos aspectos más a tener en cuenta a la hora de montar tu propio negocio pero hoy nos centraremos en uno muy importante, el propósito. Hasta el menos existencialista tiene sus momentos de duda en el que se pregunta cuál es el sentido de las cosas, bien, pues en el mundo de los negocios ocurre lo mismo ya que un negocio sin propósito, no tiene cabida en el mercado.
Que nuestro negocio necesite un propósito puede parecer obvio pero lo que no lo es tanto es que tenemos que asegurarnos que este propósito llegue al cliente. Cuando montamos una empresa de retail tenemos que hacernos dos preguntas muy importantes: ¿Hay un propósito como tienda? y ¿Es consciente el cliente de éste propósito? Si alguna de las respuestas es negativa lo más probable es que nuestro negocio no acabe triunfando. Así que lo que tenemos que hacer primero para evitar el fracaso es buscar un propósito bien claro, como por ejemplo, si tu tienda es de alimentación te puedes marcar el propósito de ofrecer una alimentación ecológica para que el cliente tenga los mejores beneficios saludables, porque como es evidente, el propósito siempre tiene que pensar en los beneficios para nuestros clientes y esto hay que plasmarlo en un eslogan que será el recordatorio del cliente para que vaya a comprar.
Un claro ejemplo de empresa con un propósito muy claro y firme es Walmart, una corporación multinacional de minoristas de origen estadounidense que opera en cadenas de grandes almacenes de descuento y clubes de almacenes. El propósito de esta exitosa empresa es el de ofrecer a sus clientes los precios más bajos sin dejar de lado la calidad. Pero además se asegura que el propósito le llegue al cliente gracias a su eslogan: Always low prices (siempre precios bajos), aunque esta empresa no ha llegado a nuestro país esperemos que pronto lo haga. Otro ejemplo es la empresa Inditex, la cual, nos incita a cambiar nuestro armario constantemente a precios razonables. Su propósito es claro ya que ofrecen constantemente ropa nueva en sus tiendas para que tengamos el armario siempre renovado.
Como hemos visto, es muy importante marcarnos un propósito en nuestro negocio pero también lo es que éste llegue a nuestros clientes porque si no es así, de nada sirve tener un propósito si nuestros clientes no saben cuál es. Tenemos que tener eslóganes bien claros para que muchas personas se sientan identificadas con él y sientan la necesidad de ir a comprar a nuestra tienda. Por lo tanto, es de máxima prioridad tener un propósito en nuestro negocio. No tenemos que tener negocios ambiguos que no tengan un mensaje claro que llegue al cliente y les beneficie. Si tenemos o queremos montar un negocio con estas características les aseguramos que este no verá por mucho tiempo la luz del sol. Así que marquemos un propósito a nuestro negocio siempre con la premisa de beneficiar al cliente, sin olvidarnos de plasmarlo en un buen eslogan para que el cliente sea consciente de éste y haga lo que más nos gusta, comprar.