Vicio es una de las hamburgueserías de éxito del momento. Esto es así, gracias a sus acertadas estrategias de marketing y la cercanía hacia sus seguidores. En menos de dos años, el grupo ya cuenta con cocinas en Barcelona y Madrid. Y una sonada pop-up de verano que está teniendo lugar en la Costa Brava, Vicio Hot Spot, en el restaurante Mas Sorrer. Hay grandes colas los fines de semana.
Una historia de éxito
La startup catalana despegó en Barcelona en plena pandemia. Sin embargo, no fue este su primer intento de apertura. Su fundador, Aleix Puig, el también ganador de la séptima edición de MasterChef, trató de sacar adelante un negocio de tapas antes que no llegó a funcionar por no tener un target bien definido. Como en todo, las prisas no fueron buenas.
Como muchas otras historias de emprendimiento, Vicio comenzó en un garaje, concretamente, del barrio de Sants de Barcelona. Se trata de un concepto diferente de comida que Puig y su socio, el también emprendedor Oriol de Pablo, tenían claro que debía basarse en la buena calidad de sus productos. Bajo esta premisa, crearon una marca con mucha personalidad, la cual va más allá de un restaurante. Constituye toda una experiencia, desde que haces el pedido hasta que terminas de comer. Presenta un packaging exquisito y fácilmente identificable. Las cajas que utilizan en sus pedidos son de cuadros negros y rojos, algo que valora su clientela millennial que presta mucha atención a estos detalles.
Concepto joven
Vicio se define a sí misma como una hamburguesería cool, desenfadada y que funciona tan bien en una reunión casual como en una elegante. Su hamburguesa es el producto clásico que todos conocemos. En su elaboración se aplica la técnica smash burger, la cual consiste literalmente en aplastar las bolas de carne contra la plancha y que estas caramelicen, dejando una costra crujiente y buen sabor. El resto se basa en ingredientes frescos del día, acompañados de diferentes opciones de patatas, salsas y bebidas.
La marca nació en plena pandemia de la covid-19 y comenzó a operar en Barcelona a través de Glovo. En sus inicios tuvieron tanto éxito que más de un día tuvieron que cerrar porque no daban abasto: habían agotado los productos que necesitaban para preparar sus hamburguesas. Dos años después, Vicio continúa “dando lo suyo” en Madrid y Barcelona.
Las pop-ups de Vicio en Cataluña son muy sonadas, con una de invierno en Puigcerdá, Vicio Cold Spot, y una de verano, Vicio Hot Spot, en la Costa Brava. Estos son dos de los destinos más animados de cada temporada, frecuentados por los barceloneses que pueden seguir consumiendo su marca de hamburguesas durante las vacaciones.
El éxito de la comunicación
Vicio es un claro ejemplo de que una buena estrategia de comunicación, sí funciona. Su producto es tan visual que prácticamente se come con los ojos. Más allá de eso, la cercanía a su comunidad y la transparencia están muy trabajadas. Siempre utilizan los errores como un trampolín, para reflejar su espíritu joven y humilde, poniéndola así a su favor.
Un claro ejemplo es la rápida solución a la que llegaron cuando hace unos meses se quedaron sin stock de su packaging debido a la alta demanda de celulosa. La marca utilizó durante esos días una caja estándar que incluía una etiqueta especial: un folleto informativo con un QR. El cliente, una vez escaneado el artículo, podía encontrar un filtro de la caja original para hacer sus fotos de Instagram, creando una solución rápida y acertada, con la que además consiguieron numerosas menciones en la red social.
Como parte de su experiencia, tras invadir las ciudades con sus locales, logos y pegatinas, sacaron a la venta productos de merchandising, que se agotaron en cuestión de horas, como alfombrillas para el hogar. Y no desaprovechan ninguna otra oportunidad que se presenta. Hace unos meses, recibieron un pedido programado a cinco días vista de la firma Nike y decidieron personalizar el pedido para ellos, como un guiño a su cercanía y personalización. Nike quiso devolverle el buen gesto, invitando a los responsables del restaurante a su tienda de Paseo de Gracia. Les habían preparado como obsequio unas grandes cajas como las que la marca utiliza para enviar sus pedidos a domicilio. En el interior de ellas, se encontraban unas zapatillas personalizadas de los colores de Vicio: rojo y negro.
Los repartos de esta hamburguesería en Barcelona llegan al 98% de la ciudad. Gracias a su buen hacer, Vicio es la palabra más buscada en la aplicación Glovo tanto en la Ciudad Condal como en Madrid. Además, son el único restaurante que ha sido capaz de sacar más de mil pedidos desde un solo local en 12 horas.